El Dios del Amén (Is 65, 16) constituye una Comunidad del Amén, un grupo amado y sostenido por el Señor a través del tiempo y de las vicisitudes más diversas.
A raíz del concilio Vaticano II son numerosos los estudios que han abordado los sacramentos desde distintas perspectivas (sistemática, litúrgica, pastoral, ecuménica, misionera…); sin embargo, apenas se encuentran publicaciones que reflexionen sobre el «universo sacramental» desde el principio de la analogía.
Este interesante Vía Crucis infantil ha sido elaborado de manera amena y sencilla para que los niños conozcan cómo sucedió la muerte de Jesús, quien dio la vida por nosotros.